Enrique Méndez y Roberto Garduño

El próximo inicio de la campaña electoral propiciará que una cuarta parte de los legisladores federales en la Cámara de Diputados soliciten licencia con la finalidad de participar como candidatos a puestos de elección popular o coadyuvantes en las campañas de sus respectivos representantes partidistas.

Hasta ayer, 28 representantes populares habían solicitado licencia para participar en los comicios.

Entre los legisladores suplentes se encuentran representantes de organizaciones sociales y políticas, como Antorcha Campesina, y algunos son ex funcionarios de distintos órganos de gobierno en el ámbito estatal.

En la lista de los 28 diputados suplentes están Silvino Reyes, del PRI, empresario abarrotero del estado de Oaxaca y ex candidato a la presidencia municipal de Tuxtepec.

María Hilaria del Socorro Espinoza, también del PRI, quien fue investigada por el sistema local anticorrupción del estado de Durango por probables corruptelas en su pretendida exigencia de recursos públicos a beneficiarios de programas sociales.

También del PRI, María Vanessa Ruiz Ledesma, por el estado de México, joven estudiante de licenciatura en comunicación del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey; con su nombramiento se ha convertido en la legisladora más joven que ocupará una curul en la Cámara de Diputados, con 24 años de edad.

Dalila Rodríguez García, diputada priísta por el municipio de Chalco, forma parte del Movimiento Antorchista, de raigambre priísta. Es precedida del respaldo de miles de integrantes de su grupo político en dicha demarcación.

También Josué Muñoz Guevara, del PRI, ocupará una curul en San Lázaro. Es ferviente impulsor de las bellas artes y de la danza.

Horalia Noemí Pérez, del estado de México, llegará a San Lázaro para ocupar una de las vacantes de los legisladores que solicitaron licencia.

En el caso de Martha Julissa Bojórquez, del estado de Sonora, llega precedida por su trabajo en defensa del registro civil de esa entidad. Se le recuerda como denunciante de un fraude por 4 millones de pesos, producto del desvío de recursos en el gobierno estatal.

Joaquina Viveros Córdova, también diputada por el PRI, fungió como secretaria de Acción Femenil de la CNC y ha sido señalada por integrantes de esa organización por sus reiterados escándalos como funcionaria cenecista.