Braulio Carbajal

Del monto total de remesas reportadas en el primer trimestre de 2021, alrededor de 60 por ciento tuvo como destino alguno de los 10 estados con mayor índice de pobreza de México, según información del Banco de México (BdeM). Esos recursos ayudaron a familias de dichas entidades a enfrentar los estragos provocados por la pandemia de Covid-19.

De acuerdo con datos del banco central, entre enero y marzo pasados el flujo de divisas que ingresó al país ascendió a 10 mil 615 millones de dólares, de los cuales 6 mil 535 millones fueron para Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Puebla, Michoacán, Veracruz, estado de México, Guanajuato, Jalisco y Ciudad de México.

Los recursos que recibieron estos 10 estados durante el primer trimestre de 2021 es la cifra más alta desde que hay registros, es decir, 2003; además de que es superior en 12.5 por ciento respecto de los 5 mil 812 millones de dólares reportados en el mismo periodo del año pasado.

Según los datos más recientes del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el estado más marginado económicamente del país es Chiapas, debido a que 75 por ciento de su población se encuentra en situación de pobreza. Dicha entidad, apunta el BdeM, fue la que mayor aumento tuvo en la recepción de remesas.

Durante el primer trimestre de 2021, dicho estado del sur-sureste del país reportó un ingreso de divisas por 345 millones de dólares, 38 por ciento más en comparación con los 250 millones de dólares de igual lapso de 2020.

El segundo estado más pobre, con 66 por ciento de su población en esa situación es Oaxaca, que registró un alza de apenas 2.4 por ciento anual en sus remesas al pasar de 484 millones a 496 millones de dólares.

Por orden descendente en la lista de entidades más pobres, Guerrero, reportó un alza anual de 14.4 por ciento en sus remesas; Puebla, una caída de 6 por ciento; Michoacán, un aumento de 8.7; Veracruz, de 8.6; estado de México, de 16.2; Guanajuato, de 4.6; Jalisco, de 17.9, y Ciudad de México, de 27 por ciento.

De acuerdo con el Foro de Remesas del Centro de Estudios Monetarios de Latinoamérica (Cemla), la contribución de los envíos llega a ser muy alta en los estados de menores ingresos por habitante; sin embargo, es ignorada en la medición de la pobreza en México.

El organismo señaló que está comprobado que los envíos de dinero de los connacionales que radican en el extranjero incrementan los niveles de vida de los hogares receptores, ayudando a reducir los índices de pobreza en el país; no obstante, la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares no logra registrar gran parte de esos recursos.

De hecho, de acuerdo con el BdeM, las remesas, cuyo monto se encuentra en un nivel sin precedente, se han convertido en un auténtico salvavidas para las familias mexicanas con menores ingresos, pues de acuerdo con sus estimaciones, llegan a representar hasta 40 por ciento de sus ingresos totales.