Juan Ricardo Montoya

Ayer fueron sepultadas 10 personas en los dos cementerios cercanos

Cortejo fúnebre de Gerardo Preciado, una de las víctimas, rumbo al panteón municipal, a tres días de la tragedia en Tlahuelilpan.

Pachuca, Hgo., Por el número de personas fallecidas a causa de la explosión en la toma clandestina de un ducto de Pemex el viernes pasado, que ayer llegó a 91, quedó rebasada la capacidad de los panteones de Tlahuelilpan y de la comunidad de Teltipán, municipio de Tlaxcopan.

Según datos oficiales, 10 personas fueron sepultadas ayer; cuatro en el viejo cementerio de Teltipán, comunidad ubicada en los límites de Tlahuelilpan, a un kilómetro de donde ocurrió la tragedia, y a otro se lo llevaron a Iguala, Guerrero, de donde era originario; de los otros cinco no se dieron detalles.

Entre el domingo y el lunes cuatro vecinos de Teltipán fueron enterrados. Los lugareños dijeron que el panteón de esta comunidad tiene media hectárea y no es muy habitual que haya sepelios.

Generalmente cuando alguien se muere aquí se lo llevan al panteón municipal de Tlahuelilpan, pero en esta ocasión no hubo lugar, por lo que acudieron al cementerio del pueblo, dijo don Erasmo, vecino del lugar.

Ayer fueron sepultadas tres personas en ese panteón, entre ellos Carlos Velasco y Patricia Prado Vélez, a quienes oficiaron misa de cuerpo presente en la parroquia de la Preciosa Sangre de Cristo de Teltipán, que estuvo a cargo del obispo de Tula, monseñor Juan Pedro Juárez Meléndez.

Por acuerdo previo de ambas familias, al término del acto religioso primero salió el féretro de Carlos, cuya procesión lo despidió con música de banda; 10 minutos después lo hizo el de Patricia, acompañado por un grupo de mariachis.

A la entrada del panteón, ubicado a unas cuadras de la iglesia, por lo reducido del espacio se suscitó una aglomeración, por lo que el primer cortejo apuró la sepultura y después ingresó el segundo. Por la tarde se realizó el sepelio de un vecino de Teltipán.

El alcalde de Tlahuelilpan, Juan Pedro Cruz Frías, informó que ya solicitó al gobierno federal terreno para sepultar a la gente que murió durante el estallido porque el cementerio municipal es insuficiente.

Comentó que son muchos los muertos y que necesitarán más espacio para inhumarlos. Agregó que afortunadamente está por concretarse un acuerdo con los dueños de una superficie de tierra aledaña para ampliar el actual panteón.