Susana González G.

Las exportaciones de jitomate mexicano hacia Estados Unidos seguirán fluyendo por la gran demanda que existe en ese país y serán sus consumidores quienes terminen pagando la cuota compensatoria de 17.5 por ciento impuesto por su gobierno, no los productores y exportadores mexicanos, coincidieron Alfredo Díaz, miembro de la comisión que a nombre de 650 empresas tomateras negocia con el Departamento del Tesoro, y Juan Carlos Anaya, director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).

Con o sin arancel vamos a seguir exportando jitomate hacia Estados Unidos porque sus propios productores no pueden satisfacer la demanda existente, no tienen la capacidad instalada para producir todo el volumen que vendemos y tendrían que invertir mucho para poder hacerlo a mediano plazo, aseveró Alfredo Díaz, director de Asociación Mexicana de Horticultura Protegida, la cual aporta casi la mitad de las exportaciones de jitomate hacia Estados Unidos.

Los consumidores estadunidenses, dijo, ya están acostumbrados a las variedades, sabor, calidad, frescura y precio de los jitomates mexicanos. Esa demanda no va a cambiar ya que el consumo per cápita en las últimas décadas prácticamente se ha duplicado. Además las nuevas generaciones, como los millennials, acostumbran poner jitomate como botana en sus reuniones y fiestas.

México es el primer exportador mundial de jitomate y Estados Unidos el primer importador del mismo, ambos se complementan y los productores mexicanos cubren 55 por ciento del consumo del vecino país, explicó Juan Carlos Anaya. Descartó que por el gravamen una parte de las exportaciones de jitomate se queden en México, se genere saturación en el mercado y una baja en su precio.

Alfredo Díaz previó que muchas pequeñas y medianas empresas del sector tendrán problemas para pagar el arancel e incluso se vean obligadas a destinar parte de su producción al mercado interno o lleguen a cambiar de cultivo si la situación no se normaliza o les cancelan pedidos sus clientes en Estados Unidos. Son muchos los escenarios que pueden darse, dijo.

El subsecretario de Industria y Comercio de la Secretaría de Economía, Ernesto Acevedo, consideró que en el mercado nacional podríamos ver un efecto positivo al tener más jitomate en venta, pero descartó que se genere una sobreoferta que desplome su precio aunque sí previó que éste podría mejorar.