Alonso Urrutia

Conforme al último reporte del Instituto Nacional Electoral sobre los manejos financieros de los candidatos a gobernador, con corte al último día de campaña, los partidos y coaliciones informaron gastos muy por debajo del tope permitido por cada legislación. Con la excepción de la candidata de Va por Hidalgo, Carolina Viggiano, quien reportó egresos por 41.1 millones de pesos, equivalentes a 81 por ciento de lo permitido, el resto de los aspirantes oscilaron entre 30 y 63 por ciento.

Como ha sido una tendencia consistente en los reportes financieros, cada vez hay más margen de diferencia entre los informes de ingreso y gasto de recursos con respecto a los topes de gastos de campaña en cada entidad (variable en función del número de electores y las legislaciones locales).

El reporte de fiscalización del INE (única instancia facultada para revisar los recursos de elecciones federales o locales) indica que en donde se ejerció una mayor cantidad fue en Oaxaca, cuando aún faltaría sumar únicamente el gasto ejercido durante la jornada electoral por cada coalición y partido.

En esa entidad, con un tope fijado en 44 millones de pesos, el virtual gobernador, Salomón Jara, postulado por Juntos Hacemos Historia (Morena, PT y PVEM), ejerció 28.2 millones de pesos; Alejandro Avilés, de la alianza PRI-PRD, 29.4 millones, y la panista Antonia Díaz, 20 millones.

En Tamaulipas, donde se fijó el tope más elevado para campaña de gobernador de las seis que estaban en juego (147.3 millones de pesos), el aspirante vencedor, Américo Villarreal, postulado por Morena y los partidos Verde y del Trabajo, reportó un ejercicio de 64.4 millones de pesos (apenas 43 por ciento de lo permitido) y Cesar Augusto Verástegui, de Va por Tamaulipas, informó de gastos e ingresos por 76.1 millones de pesos (51 por ciento).

Los reportes de candidatos en Durango son, en general, los más bajos de todos los aspirantes que participaron buscando una gubernatura. Esteban Villegas, próximo gobernador postulado por Va por Durango, indicó un gasto de 26.4 millones de pesos, pero su contrincante de Morena, Marina Vitela, no usó ni la tercera parte, con 19.8 millones de pesos de los 63.5 millones permitidos en esa elección.

En Aguascalientes, donde el instituto local fijó en 30.7 millones de pesos el tope de gastos de campaña, la gobernadora electa, Teresa Jiménez, de Va por Aguascalientes, reportó ingresos y gastos por 17.2 millones. En tanto, la candidata de Morena, Nora Ruvalcaba, entregó información que acredita ingresos y gastos por 13.2 millones.

En Hidalgo, el máximo de gastos permitido fue de 47.2 millones de pesos, el triunfador, Julio Ramón Menchaca, candidato de la alianza Morena-PT, reportó un gasto-ingreso de 36.4 millones.

Finalmente, en Quintana Roo, con el tope de gastos de campaña más bajo, con 19 millones de pesos, el reporte de la candidata triunfadora de Juntos Hacemos Historia, María Elena Lezama, reconoció gastos e ingresos por 10.9 millones de pesos, en tanto que la aspirante de Va por Quintana Roo (PAN-PRD) indicó gastos por 10 millones de pesos y la priísta Angelina Hendrikcs, 8.6 millones.

La práctica de reportar gastos muy por debajo del tope permitido obedece a evitar que, si el INE les detecta egresos no reportados que se sumarían al ejercicio reconocido, derive en un eventual rebase de tope de gastos de campaña y la nulidad de la candidatura.