Jessica Xantomila y Laura Gómez

Un grupo se enfrenta con policías

En la Ciudad de México se llevaron a cabo ayer manifestaciones por el Día de Acción Global en favor de un Aborto Legal. Durante las marchas hubo algunos choques con la policía, que les impidió llegar al Zócalo.

En el Día de Acción Global por un Aborto Legal, Seguro y Gratuito, que se conmemoró ayer, cientos de mujeres marcharon para exigir la interrupción legal del embarazo en todo el país. En la Ciudad de México, aunque las dos movilizaciones que se programaron tenían como destino el Zócalo capitalino, fueron encapsuladas por la policía, que sólo les permitió llegar hasta el Eje Central Lázaro Cárdenas.

La primera movilización, convocada por colectivos feministas como Resistencia Dinofeminista, salió poco después de las 14:30 horas del Monumento a la Revolución. Apenas avanzó el contingente, conformado en su mayoría por mujeres jóvenes, cuando encapuchadas que portaban mazos rompieron cristales y dañaron parte del edificio del Sindicato del Issste, al tiempo que hicieron pintas en puestos de periódicos y en el pavimento.

A la altura de la calle Balderas, sobre la avenida Juárez, las manifestantes fueron encapsuladas por la policía capitalina, con la que se enfrentaron para exigirle que las dejaran avanzar.

Mujeres policías utilizaron extintores para disuadirlas, en tanto las jóvenes hicieron uso de mazos, cohetones, cadenas y latas de aerosol para intentar abrirse paso, pero sin éxito.

Contra el sistema patriarcal

¡Qué tiemblen, que tiemblen los machistas, que América Latina será toda feminista, Hay que abortar, hay que abortar este sistema patriarcal, fueron algunas de las consignas que corearon las mujeres, en su mayoría vestidas de negro y con pañuelos color verde, este último símbolo de la lucha por la despenalización del aborto. También portaron pancartas con mensajes como Mucho juicio sobre el cuerpo de las mujeres y poca justicia para ellas.

Después de dos horas, la policía permitió al contingente avanzar rumbo al Hemiciclo a Juárez, donde ya se concentraba otro grupo con integrantes de organizaciones populares.

El contingente convocado por la Coordinación 8M, que aglutina tanto a organizaciones feministas como a grupos sindicales y populares, que tenía programado marchar del Hemiciclo a Juárez al Zócalo, apenas pudo llegar al Eje Central Lázaro Cárdenas, donde fueron colocadas vallas metálicas para evitar que pudieran ingresar a la Plaza de la Constitución, donde se encuentra un plantón del Frente Nacional Anti-AMLO.

En un templete las manifestantes demandaron a la policía que se retirara y que frenara la represión en su contra. No es posible que no nos dejen manifestarnos para exigir el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos, señalaron. Fue después de las 7 de la tarde que la policía se replegó, entre empujones y uso de extintores, para liberar el paso a las manifestantes.

El reporte policiaco

Un total de 43 mujeres policías y 13 civiles resultaron lesionadas, con diversos golpes y quemaduras, durante la manifestación que diversos colectivos feministas realizaron ayer, aunque sólo cuatro uniformadas requirieron traslado a un hospital para su atención, sin que hubiera detenidos.

Durante más de cuatro horas, integrantes del Grupo Atenea de la Secretaría de Seguridad Ciudadana soportaron martillazos, golpes y bombas molotov de mujeres encapuchadas del colectivo Resistencia Dinofeminista, sin responder a la agresión.

La orden era contenerlas y retirarles los martillos, mazos, material inflamable, cohetones y otros artefactos que portaban para evitar la violencia, lo cual no fue suficiente, porque las manifestantes sacaban de mochilas y bolsas otros objetos para agredir a las policías.

Su encapsulamiento en el cruce de avenida Juárez y Reforma provocó su enojo y la agresión contra algunas de las mil 750 mujeres policías desplegadas. La Secretaría de Gobierno rechazó la existencia de cualquier acción de represión, pues en todo momento se trabajó en coordinación con la Comisión de Derechos Humanos capitaina

Se solicitó a las manifestantes la entrega de objetos con los que pueden causar daño, a lo que las mujeres respondieron con mayores agresiones contra las uniformadas.