Braulio Carbajal

La calificadora de riesgo crediticio Standard & Poors (S&P) ratificó este martes la nota crediticia para la deuda soberana de México tanto en moneda local como extranjera en BBB y mantuvo una perspectiva negativa –que implica una posible baja en la siguiente revisión–, al tiempo que pronosticó un crecimiento económico de 5.8 por ciento para 2021.

Pese a confirmar la calificación, la agencia hizo énfasis en los desafíos fiscales que enfrentan las empresas productivas del Estado (Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad), así como en la incertidumbre empresarial que hay en el país.

En tanto, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público informó que la ratificación permitirá al sector público y privado mexicano seguir teniendo acceso a condiciones favorables en los mercados internacionales, aspecto esencial para consolidar la recuperación económica luego de las afectaciones de la pandemia.

Destaca Hacienda los puntos favorables

De esta forma concluyeron las revisiones de 2021 a la calificación crediticia del país. Este año las tres principales agencias internacionales (Moody’s, Fitch y S&P) ratificaron el grado de inversión de México, es decir, ninguna deterioró sus notas soberanas.

En el caso de S&P, explicó que decidió mantener su calificación debido a que México cuenta con un nivel de deuda bajo y estable respecto a economías similares, además de que tiene finanzas públicas robustas y un marco sólido de política macroeconómica.

Señaló que las políticas macroeconómicas prudentes que México ha llevado a cabo respaldan su solvencia crediticia y han mantenido la confianza de los inversionistas y el acceso a los mercados de capitales, incluso durante periodos de adversidad a nivel global.

Respecto de mantener la perspectiva negativa, la calificadora señaló que ésta indica el riesgo de que en un futuro baje las calificaciones del país debido a los pronunciados pasivos contingentes asociados con el manejo de los complejos desafíos fiscales que tienen Pemex y CFE, más la incertidumbre empresarial que puede limitar el crecimiento económico.

Tras la noticia, la Secretaría de Hacienda destacó puntos favorables del comunicado de S&P; por ejemplo, su proyección de que el gobierno seguirá con un manejo responsable de las finanzas y la deuda públicas, lo cual permitirá mantener déficits fiscales moderados y una deuda estable.

Añadió que la calificadora confía en que México, por medio del banco central, continúe con el compromiso de tomar decisiones de política monetaria sólidas, independientes y oportunas, en un contexto legal e institucional muy robusto.

La dependencia también remarcó que la agencia espera que el avance del diálogo entre México, Estados Unidos y Canadá para fortalecer las cadenas de suministro y los vínculos transfronterizos en el marco del T-MEC, impulsen la inversión y mejoren el ambiente de negocios en México.