Preocupa a la OMS los riesgos que corren los pueblos indígenas

Washington. El presidente estadunidense Donald Trump, quien se negó durante meses a promover el uso de cubrebocas para combatir la pandemia del nuevo coronavirus, tuiteó una foto en la que se le ve usando uno, lo que defendió como un gesto “patriótico.

Estamos unidos en nuestro esfuerzo para vencer el invisible virus de China, y muchas personas dicen que es patriótico usar una mascarilla cuando no se puede hacer distanciamiento social, escribió Trump en su perfil. El mandatario remató su mensaje con la frase: No hay nadie más patriótico que yo, su presidente favorito.

Su primer acto público con tapabocas fue una visita a médicos y pacientes con Covid-19 en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed hace poco más de dos semanas. La imagen adjunta al tuit, en blanco y negro, corresponde a ese acto, y en ella aparece el magnate con una mascarilla que está estampada con un sello presidencial.

Trump ha reiterado que no ordenará el uso obligatorio de los cubrebocas en el país, y en algunos casos los ha visto como símbolo de debilidad ante una pandemia o crisis sanitaria. Las principales autoridades médicas del país, respaldadas por varios líderes del Partido Republicano, sostienen que el uso de mascarillas es crucial para frenar el avance del virus.

En medio de un severo rebrote en los estados del sur y oeste, principalmente en Florida, Louisiana y Texas, acompañada de una gran crisis económica, Trump se ha visto sometido a más presiones para cambiar su discurso en torno a la crisis que atraviesa la nación.

El mandatario anunció que cambiará de estrategia de comunicación y retomará los informes diarios sobre el coronavirus, eliminados a finales de abril tras sus polémicos planteamientos sobre el uso de desinfectante, rayos ultravioleta o una luz muy poderosa para tratar pacientes con Covid-19. El primer informe de esta nueva agenda lo dará desde el Despacho Oval a las 17 horas locales de hoy.

Trump insistió en que cosas buenas estaban en camino en el próximo paquete de apoyo por la epidemia, mientras se reunía con líderes republicanos del Congreso.

Hasta ayer, en Estados Unidos se reportaron 140 mil 879 muertos, 3 millones 816 mil 427 contagiados y un millón 131 mil 121 pacientes recuperados, según el recuento de la Universidad Johns Hopkins.

Desde la semana pasada se declaran más de 500 casos por día en Idaho, lo que ilustra la propagación exponencial del coronavirus en toda la geografía estadunidense.

Nueva York reportó la menor cantidad de hospitalizaciones por coronavirus en cuatro meses, pero el gobernador, Andrew Cuomo, advirtió que podría verse obligado a dar marcha atrás en la reapertura de actividades para evitar una segunda ola de contagios.

En América Latina y el Caribe se registraron ayer 162 mil 462 decesos y 3 millones 830 mil 779 contagios, según la agencia Afp.

La Organización Mundial de la Salud mostró su preocupación por los riesgos para los pueblos indígenas en América en medio de la pandemia.

En Brasil, los ministros de Educación, Milton Ribeiro, y de Ciudadanía, Onyx Lorenzoni, dieron positivo a Covid-19. El gigante sudamericano es la segunda nación más afectada por la pandemia en el mundo y la primera en América Latina con 80 mil 120 defunciones y 2 millones 118 mil 646 infectados.

Chile superó los 333 mil casos y aseguró estar preparado para los rebrotes.