Londres. El primer ministro británico, Boris Johnson, salió ayer del hospital donde estuvo internado una semana, afectado por el Covid-19, y por recomendación médica no reanudará de momento su gestión de gobierno frente a una pandemia que ya dejó casi 11 mil personas fallecidas en su país.

He abandonado hoy el hospital después de una semana en la que el Servicio Nacional de Salud (NHS, por su siglas en inglés) ha salvado mi vida, no hay ninguna duda de ello, declaró en un video el mandatario de 55 años, con ojos cansados, y vestido con traje y corbata.

Johnson agradeció en particular a “dos enfermeros, una de Nueva Zelanda y otro de Portugal, que estuvieron a la cabecera de mi cama durante 48 horas cuando las cosas hubieran podido decantarse en cualquier sentido.

Nunca agradeceré lo suficiente al personal del NHS, a quienes les debo la vida. Venceremos al coronavirus y lo haremos juntos, declaró antes Johnson, quien dio positivo a la enfermedad el 27 de marzo.

Tras varios días con fiebre, el mandatario fue ingresado el 5 de abril al hospital St Thomas antes de ser trasladado al día siguiente a la unidad de cuidados intensivos, de donde salió el 9 de abril.

El canciller, Dominic Raab, quedó a cargo del Ejecutivo después de que Johnson fue internado en el hospital.

El premier proseguirá su convalecencia en Chequers, su residencia al noroeste de Londres, anunció un vocero. Por consejo de su equipo médico, no reanudará inmediatamente el trabajo, detalló.

Todos sus pensamientos están con aquellos afectados por la enfermedad, agregó el vocero de Downing Street.

Su novia, Carrie Symonds, de 32 años, embarazada y quien también padeció la enfermedad, le envió copias de las ecografías del bebé que esperan para subirle la moral, indicó la misma fuente.

El pico de la pandemia

Con 737 nuevos muertos en 24 horas –menos que los más de 900 contabilizados durante los dos días previos–, Reino Unido es el país de Europa donde el Covid-19 es más letal, mientras Italia y España registran una desaceleración.

En el balance de ayer, el número de fallecidos por coronavirus se elevó a 10 mil 612, sólo en hospitales, ya que estas cifras no incluyen los muertos en residencias de ancianos ni en los domicilios.

El responsable de los servicios de salud, Stephen Powis, destacó la aparición de las primeras señales de estar llegando al pico en el número de nuevos casos y de hospitalizaciones. En las pasadas 24 horas, 5 mil 288 personas más dieron positivo, con lo que el número de infectados se elevó a 84 mil 270.

El gobierno debe enfrentar el descontento entre el personal sanitario, que denuncia la falta de equipos de protección.

El mayor sindicato de personal médico, la Asociación Real de Enfermeras, aconsejó al personal sanitario rechazar en última instancia trabajar si se enfrentan a una carencia grave de equipo de protección contra el virus.