Laura Poy y Ángeles Cruz

Reconvertidos para atender a pacientes de Covid-19, las salas de espera lucen vacías

Reconvertidos en hospitales de referencia para la atención de pacientes de Covid-19, los institutos nacionales de Enfermedades Respiratorias (INER) y de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán aún tienen salas de espera vacías y escasa afluencia de pacientes.

En el primero, por medio de carteles, se informa que desde el 23 de marzo sólo se atenderá a enfermos con síntomas propios del nuevo coronavirus, al convertirse en un Centro de Atención Exclusiva de Covid-19, por lo que todas las citas médicas deberán reprogramarse, en algunos casos, hasta nuevo aviso.

En un recorrido de La Jornada, se constató que como parte de las acciones para atender a personas infectadas, en la puerta principal del INER se instaló un pasillo de acceso para pacientes con Covid-19, al tiempo que se mantienen estrictas medidas de control en la entrada al nocosomio.

En el Instituto Salvador Zubirán se habilitó el área de urgencias como zona única de atención a quienes presenten síntomas de contagio, y se estableció un perímetro de seguridad para su ingreso. A los visitantes que acuden a conocer el estado de salud de algún paciente, se les pide mantenerse en contacto con el hospital vía telefónica, con el fin de recibir los reportes médicos, y se pide a los familiares no permanecer en las inmediaciones del instituto.

En el Hospital Juárez de México, otro de los cuatro nocosomios de referencia en la Ciudad de México para atender a personas infectadas con el virus, se mantienen estrictas medidas de control en el ingreso y se prohíbe la entrada a menores de edad y mayores de 65 años.

Ubicado al norte de la capital del país, donde acuden enfermos sin seguridad social, incluso de entidades vecinas como Hidalgo y estado de México, hasta ayer se mantenía con poca afluencia de pacientes en la zona de urgencias.

En el Hospital General Doctor Manuel Gea González se informó que queda prohibido el acceso al área de urgencias a mujeres embarazadas, niños y adultos mayores que no acudan a atención médica. También se ordenó que todo familiar con paciente en observación u hospitalización debe permanecer en una carpa ubicada en la torre de especialidades con el fin de evitar cualquier aglomeración.

En el Instituto Nacional de Cancerología se mantienen restricciones para el acceso y sólo un familiar puede acompañar al paciente y si es posible que sólo el enfermo acceda al nocosomio. Lo mismo ocurre con las citas de especialidad, las cuales no se han cancelado pero se solicita a los pacienten que se presenten con 15 minutos de antelación, y si es posible, que accedan sin compañía a la torre de especialidades.