Roberto Garduño y Enrique Méndez

La Cámara de Diputados revisó el alcance de la Constitución de 1917 y en la sesión que tuvo un registro de 298 de los 500 legisladores, las bancadas plantearon corregir retrocesos, pero también no dar marcha atrás en temas fundamentales.

En tribuna, Dolores Padierna (Morena) señaló que el Congreso debe revertir reformas que claudicaron en materia de soberanía o derechos sociales. Nuestra Constitución no es ya la de 1917, aunque algunos de sus aspectos positivos permanezcan. La Constitución ha sido un espacio de disputa y en múltiples artículos testimonio de la derrota de los ideales de los constituyentes originales y por ello testimonio de la derrota del pueblo de México, dijo.

Resaltó que las reformas propuestas por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en particular la del artículo 4 para garantizar el derecho al bienestar, son parte del nuevo proceso de transformación.

Rubén Moreira (PRI) sostuvo que no se puede claudicar en temas como el Estado laico, derechos humanos y sociales. Refirió que la reforma de 2011 en materia de derechos humanos se basó en las garantías individuales discutidas en 1917. Felizmente se ampliaron los derechos. El árbol dio frutos en los principios de universalidad, progresividad, indivisibilidad y pro persona. No toquemos lo que nos ha hecho grandes.