Eirinet Gómez y Saida Chiñas

Bajaron del Caribe Liza para divertirse mientras cargaban el buque // A Sofía, bailarina de noche y estudiante de derecho de día, la reportan como desaparecida

Tras el atentado contra el centro nocturno El Caballo Blanco, un policía municipal resguarda la escena del crimen en la ciudad de Coatzacoalcos, ubicada en el sur del estado de Veracruz.

Coatzacoalcos, Ver., Dos marinos filipinos se encuentran entre las 28 personas que perecieron en el atentado contra empleados y parroquianos del bar El Caballo Blanco de esta ciudad, informó la Fiscalía General del Estado de Veracruz.

Los marineros, que horas antes habían desembarcado del buque petrolero Caribe Liza, con bandera de Inglaterra –que atracó en la Terminal Marítima de Pajaritos–, fueron identificados como Nathaniel A. Alindan y Bryan G. Varron.

Ambos bajaron del barco con el fin de distraerse mientras se realizaban las maniobras de carga en el puerto de Coatzacoalcos. Los cuerpos aún no han sido entregados al capitán del barco, informaron fuentes de la agencia naviera.

La embarcación llegó el lunes a Coatzacoalcos y tanto Bryan G. Varron como Nathaniel A. Alindan decidieron acudir al bar mientras se cargaba el navío.

Procedente de Houston, la embarcación volvería a esa ciudad estadunidense este miércoles, informaron agentes navieros. Los dos marinos filipinos trabajaban en la zona de máquinas.

De manera extraoficial se menciona que entre los heridos podría haber por lo menos otras dos personas de origen europeo, que fueron reportadas como desaparecidos tras el incendio del bar, lo cual no ha sido confirmado por las autoridades.

En tanto, desde las primeras horas de este miércoles familiares de las personas que murieron en el atentado contra el bar El Caballo Blanco acudieron a las instalaciones regionales de la Fiscalía General del Estado (FGE) con el propósito de reclamar los cuerpos.

En el lugar prevaleció el desorden. Mientras funcionarios de la FGE buscaban a familiares de personas fallecidas identificadas, otras pedían informes acerca de quienes están en calidad de desaparecidos o que aún no eran identificadas por los forenses.

¡Familiares de Israel Martínez López!, gritaban los empleados de la FGE, mientras los parientes sollozaban por los rincones tras confirmar la trágica noticia.

De los 28 fallecidos hasta la noche del miércoles, sólo 13 habían sido reconocidos: Pedro Ricardo García, Carlos Alberto Arreola, Óscar Pérez Soto, Erick Hernández Enríquez, Abril Ojeda Sierra, Catalina Cecilio Díaz, Anahi Granados de la Paz, Antonio de Jesús Olaf Sadir, Romeo Antonio López Rodríguez, Agustín Cortés Santos, Samuel Morales López, Mario Alejandro Martinez Lugo y Miguel Ángel González.

Entre las personas que han acudido al servicio forense de la FGE están familiares de Xóchitl Nayeli Irineo Gómez, de 24 años, madre de un niño de tres y otro de siete años de edad, que trabajaba en el bar por la noche y en el día estudiaba derecho.

Sofía, como la conocían en el bar, era bailarina en El Caballo Blanco y la noche del ataque estaba dentro, relató una de sus tías. Sus familiares insisten en pedir informes en la FGE y los hospitales de la ciudad, hasta ahora sin éxito.