Laura Poy Solano

La asignación será transparente

Con la aprobación de la reforma a los artículos 3, 31 y 73 constitucionales, será el Estado, por conducto de la Secretaría de Educación Pública (SEP), el que mantendrá el control de las plazas docentes, afirmó Esteban Moctezuma Barragán, titular de la dependencia.

Señaló que el alcance del artículo decimosexto transitorio del dictamen aprobado en San Lázaro –que establece que los derechos laborales de los trabajadores de la educación se regirán por el artículo 123, apartado B, con excepción del ingreso, promoción y reconocimiento– es reconocer a los maestros como trabajadores del Estado, así ha sido siempre y así será.

En conferencia de prensa, insistió en que se mantendrá un diálogo abierto y permanente con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y convocó a los dirigentes a sumarse a la elaboración de las leyes secundarias.

Sin embargo, puntualizó que una negociación siempre es un sistema complejo de dar y recibir, de obtener y ceder, y en materia educativa hay una enorme gama de presiones y de posiciones. Si lo ves desde el punto de vista de los sindicatos, a lo mejor hubiesen querido más, y de la oposición, también, pero nosotros tuvimos una salida central: que quien tenga más sean los niños de México y los maestros, y así quedó. Es una reforma para los niños y los maestros.

Insistió en que más que una reforma se construyó un acuerdo educativo sin imposiciones y con diálogo. Explicó que una vez que entren en vigor las modificaciones, que aún debe aprobar el Senado y al menos 17 congresos estatales, se creará un mecanismo transparente para la asignación de plazas en la que todos sepan quién y cómo recibió un cargo magisterial.

Moctezuma reconoció que el tema de las plazas es uno de los más álgidos y complejos de la agenda educativa, pero rechazó que con la nueva reforma se genere la venta y compra, tras enfatizar, en referencia a las críticas de la oposición legislativa, que a la hora de votar hay quienes le dieron más peso a la política que a la educación.

Reconoció que desafortunadamente hay una enorme corrupción en la SEP, que tiene relación con las decisiones administrativas básicas de las escuelas y entre los sindicatos que participan, pero dijo que la reforma educativa peñista tampoco acabó con esa corrupción.

Descubrimos, desde que estamos en la SEP, que el discurso de que antes se vendían las plazas y con la reforma educativa se evitó; que antes se heredaban las plazas pero con la reforma se evitó, no se sustenta en los hechos. Si hablan con los maestros les van a decir que para hacer un trámite administrativo, cambiarse de una escuela a otra, lograr una promoción o que les pagaran algún adeudo, han tenido un problema de extorsión, de corrupción o de pedirle favores de todo tipo.

Reiteró que la instrucción del presidente Andrés Manuel López Obrador ha sido muy clara: el manejo de las plazas es de la SEP, y nos ha pedido un esquema transparente que permita poner sobre una mesa de cristal las plazas vacantes, las que se van a asignar, los aspirantes, el presupuesto y la planeación de las necesidades de servicio para que todo mundo conozca por qué y a quién se asignaron, y así como hoy se hace con las de la burocracia del gobierno federal, que podamos transparentar todas las plazas magisteriales.