César Arellano García

Distintas organizaciones sociales marcharon ayer del Ángel de la Independencia al Hemiciclo a Juárez para manifestar su rechazo al Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México.

La propuesta del equipo de transición de utilizar las terminales cercanas en lo que continúa la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México ayudaría actualmente a descongestionar las operaciones aéreas, aunque sólo sería un mejoralito, señaló Claudio Arellano Rodríguez, director de investigación de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA).

No es la solución completa, aunque sí ayudaría en tanto no contamos con un aeropuerto nuevo, dijo.

La Universidad Aeronáutica de Querétaro y ASA firmaron un convenio de colaboración para formar futuras generaciones de sobrecargos de aviación.

Arellano Rodríguez indicó que la institución está convencida de promover la capacitación del sector aeronáutico y garantizar la seguridad en las operaciones en aeropuertos.

“El Centro Internacional de Instrucción de ASA es reconocido por la Organización Civil de Aviación Internacional como uno de los centros regionales de excelencia.

A nivel regional hay 21 centros que tienen este reconocimiento y México cuenta con uno de ellos. Para mantener la vigencia hay que estar pasando auditorías y mantener el nivel de excelencia, lo que garantiza una calidad de formación en los especialistas de aeronáutica.

En ese sentido lo que hace en especial esta alianza, dijo, es la calidad que respalda la experiencia de las dos instituciones.

Agregó que el próximo lunes ASA iniciará la carrera de formación de pilotos comerciales, respondiendo a las necesidades de crecimiento de la industria aeronáutica en México.

Federico Pérez Fuentes, secretario de Planeación y Vinculación de la citada universidad, comentó que esa casa de estudios se inauguró en 2006, pero el año pasado dieron inicio con el programa para formar a sobrecargos.

La alianza es precisamente por la seguridad que se maneja en ese medio. La formación que manejamos tiene que ser muy seria, completa, desde seleccionar bien a las personas que ingresan hasta entender que son personas muy importantes en la aeronave y salvaguardan vidas de todos los pasajeros a bordo.

Yesenia Nava, líder de sobrecargos, añadió que esta será la cuarta generación que ingresé al curso de tres meses, e indicó que más del 60 por ciento de los egresados laboran en diferentes líneas aéreas. El curso inicia el 10 de septiembre y consta de 282 horas teórico-prácticas.