Compras, el lunes pasado, en el marco de la crisis sanitaria.

Las tiendas de autoservicio han sido el sector más resistente a la parálisis derivada de la contingencia sanitaria debido a que ofrecen productos esenciales para la población; no obstante, analistas coinciden en que la segunda mitad del año el panorama cambiará, pues ante la importante contracción económica que se avecina sus ventas bajarán.

Cifras compartidas a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) indican que durante el primer trimestre del año, los ingresos de Walmart, la minorista más grande del mercado, al concentrar 67 por ciento de las ventas, crecieron 19.9 por ciento, principalmente por las compras de pánico ante la pandemia.

En tanto, los ingresos de Soriana crecieron 9.9 por ciento, los de Chedraui, 14.1 y los de la Comer, 25.6. Números impulsados por el temor al Covid-19.

Para Marisol Huerta, las cifras de las tiendas de autoservicio son resultado de un hecho atípico que las ha colocado como las grandes ganadoras en el entorno actual, efecto que prevalecerá al menos durante el segundo trimestre del año.

Sin embargo, apuntó, el avance que registran no es sostenible a ­largo plazo en un entorno de debilidad en el consumo que se prevé a corto plazo por el deterioro económico que se estima a lo largo de 2020, lo que creará un entorno competitivo más agresivo en el sector.

Especialistas del área financiera prevén que en 2020 la economía se contraiga entre 6 y 12 por ciento, mientras el consumo caerá casi 7 por ciento.

Verónica Uribe, analista bursátil de Monex, señaló que durante el segundo trimestre del año las ventas de las tiendas de autoservicio seguirán observando el beneficio de la pandemia, y aunque no prevé una caída en sus ventas en línea con el consumo en general, sí anticipa una disminución.

La moderación en el consumo se espera para el segundo semestre del año. Para el sector autoservicios no esperaríamos una caída, sino un menor crecimiento, es decir, no creemos que los crecimientos tan elevados que se han observado continúen a ritmos de 20 por ciento, y podrían regresar a niveles de entre 2 y +5 por ciento, señaló.

De acuerdo con la consultora Nielsen, los productos que registraron mayor demanda durante la cuarentena fueron leche, cerveza, refrescos, cereales, detergente para ropa, papel higiénico y cubrebocas.

Lo anterior se alinea con lo reportado por las compañías minoristas, destacando los mayores aumentos en abarrotes, perecederos, higiene personal y limpieza del hogar.

La analista de Monex dijo que las mayores ventas en esos tipos de productos durante la cuarentena han logrado más que compensar la baja en otras líneas de productos tales como ropa y calzado, y productos de temporada de verano.

Esa tendencia se podrá observar en tanto dure la contingencia, ya que los consumidores están priorizando la compra de productos esenciales, puntualizó.