Dora Villanueva

En marzo pasado, cuando la baja en el precio del crudo abonó a pérdidas por medio billón de pesos en México y la emergencia sanitaria por el Covid-19 avanzaba en el país, el gasto en obra pública para hidrocarburos creció 136.9 por ciento respecto del año anterior y la que va a salud (hospitales, clínicas y equipamiento a éstos) restó 69.5.

De cada 100 pesos que se destinaron a obras en la industria petrolera, menos de cuatro fueron para infraestructura en salud, revelan datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

La inversión física en hidrocarburos fue por 26 mil 215.2 millones de pesos, equivalente a 43 por ciento de todo el gasto del gobierno federal en obra pública, mientras en salud alcanzó 983.5 millones, de acuerdo con las estadísticas oportunas de las finanzas públicas.

De enero a marzo el gasto en inversión física del gobierno federal sumó 153 mil 822 millones de pesos. La cifra refleja un crecimiento de 5.5 por ciento en comparación con el año anterior, pero en su interior se repiten la concentración en el gasto de hidrocarburos y la merma para el rubro eléctrico, educación y salud.

De acuerdo con la SHCP, se destinaron 70 mil 328.4 millones de pesos a inversión física en hidrocarburos, 4.6 por ciento más respecto del mismo trimestre de 2019 y casi la mitad de todo el gasto en obra pública para ese periodo.

En contraste, el gasto a salud sumó mil 300.4 millones de pesos, 63.7 por ciento menos en comparación con el año anterior y menos de uno por ciento de toda la inversión física en este primer trimestre.

Según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2019, en México el tiempo promedio de traslado a un hospital en caso de emergencia es de 42 minutos; en Oaxaca y Chiapas, los estados donde hay menor cantidad de ingresos a escala nacional, es de 69.

Con dichos antecedentes, el año pasado se presupuestaron 17 mil 752 millones de pesos en inversión física para salud. De ese monto se subejerció 65 por ciento. Mientras, en el primer trimestre de 2020 la inversión de capital con que la Secretaría de Energía apoya a Petróleos Mexicanos para la construcción de la refinería en Dos Bocas, Tabasco, sumó 16 mil 63 millones de pesos, más que todo el gasto en infraestructura hospitalaria y clínica del año pasado.

De acuerdo con comparativos llevados a cabo por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México es el país del grupo con la capacidad hospitalaria más escasa, pues hay 1.4 camas por cada mil habitantes, y donde el gasto de gobierno en salud también es más bajo, 586 dólares per cápita.