Dora Villanueva

México no es ajeno a la menor tendencia de crecimiento en todo el mundo, pero requiere insistir en políticas enfocadas a favorecer al sector privado, consideró Kristalina Georgieva, nueva directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI).

El compromiso del país, proyectado en el presupuesto para el próximo año, es continuar con políticas amigables para el crecimiento del sector privado y más de éstas deben realizarse, declaró en el marco de las reuniones de otoño del Banco Mundial y el FMI, que se llevan a cabo en Washington.

El organismo recortó recientemente su estimado de crecimiento para el país en este año a 0.4 por ciento y para 2020 estima que el producto interno bruto (PIB) se expanda 1.3 por ciento, fruto de una alta incertidumbre política y los subejercicios de gasto público acumulados en el país.

Georgieva recalcó que en el FMI están muy cercanos a los riesgos que la economía (mexicana) está enfrentando y aclaró que el país aún cuenta con el respaldo de la línea de crédito flexible por hasta 74 mil millones de dólares que fue renovada este octubre y está disponible por dos años.

Este es un amortiguador que está justo ahí para proteger contra esos altos riesgos que vemos hoy día.

La directora gerente consideró que si bien eventualmente dicha línea de crédito será innecesaria, aún no se está en ese punto. La discusión actual es más sobre el tamaño de este amortiguador que se provee a México.

AL crecerá sólo 0.2%

En su primera rueda de prensa al frente del FMI, Georgieva destacó el caso de América Latina, que se desacelerá como ninguna otra región durante este 2019. La estimación más reciente del organismo apunta a un crecimiento de 0.2 por ciento.

Sobre Argentina, que aplica políticas de austeridad dictadas por el organismo a cambio de un crédito por más de 56 mil millones de dólares, recalcó que esperarán los resultados de las elecciones presidenciales en puerta. Estaremos muy interesados en ver cuál esbozo de política habrá y entonces podemos continuar esta conversación.

El acento en la desaceleración de la economía mundial lo ha dado la relación comercial entre Estados Unidos y China, ha insistido en documentos y foros el organismo. En esta ocasión Georgieva apremió a ambas economías a no detenerse en una tregua y que se restaure la paz comercial.

Tenemos que volver al comercio como un motor de crecimiento. Y no estamos buscando un pequeño impulso, queremos una aceleración, recalcó.