Israel Rodríguez

Durante el primer trimestre de 2018, el desempleo descendió, pero aumentó el número de personas ocupadas en el sector informal de la economía, caracterizado por la ausencia de protección social y salarios precarios, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

De acuerdo con los resultados de la Encuesta nacional de ocupación y empleo correspondiente al periodo enero-marzo de 2018, las personas desocupadas en el país sumaron un millón 700 mil, que representan 3.1 por ciento de la población económicamente activa (PEA), porcentaje menor a 3.4 por ciento de igual trimestre de 2017.

Pese a la disminución del desempleo se observó que en el primer trimestre de 2018 todas las modalidades de trabajo informal sumaron 30 millones de personas, lo que representó un aumento de 1.2 por ciento respecto al mismo lapso de 2017 y significó 56.7 por ciento de la población total ocupada, que alcanzó 52.9 millones de personas.

Esto implica que casi seis personas de cada 10 que laboran en México lo hacen en la economía subterránea sin las mínimas condiciones de protección social.

La población subocupada, que se refiere a las personas que tienen un empleo pero debido a la insuficiencia de sus salarios se ve obligada a buscar un adicional para obtener más ingresos, llegó a 3 millones 600 mil.

Con cifras desestacionalizadas, la tasa de subocupación disminuyó 0.1 puntos porcentuales durante enero-marzo de este año frente a la del trimestre inmediato anterior.

El Inegi precisó que en el primer trimestre del año la población ocupada alcanzó 52 millones 900 mil personas, de las cuales 32.8 millones son hombres y 20.1 millones mujeres, cantidad superior en un millón frente a la del mismo lapso de 2017.

Al considerar a la población ocupada en relación con el sector económico en el que labora, 6.7 millones de personas (12.7 por ciento del total) trabajan en el sector agrícola, 13.6 millones (25.8 por ciento) en el industrial y 32.2 millones (60.9 por ciento) están en el terciario o de los servicios, mientras el restante 0.6 por ciento o 30 mil 627 personas no especificó su actividad.

Las entidades federativas que tienen las mayores tasas de participación en la actividad económica (cociente entre la PEA y la población de 15 o más años de edad) son Colima con 66.7 por ciento, Nayarit, 66.2, y Baja California Sur, 66.1.