Alonso Urrutia

El Instituto Nacional Electoral presentará esta semana ante la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales una denuncia relacionada con un nuevo intento de comercialización de un extracto del padrón electoral de un corte que se ha comprobado corresponde a marzo de 2018. Aunque no desconocemos la gravedad de la situación porque se trata de datos sensibles de la ciudadanía, entre los campos que fueron expuestos no se encuentran incluidos los datos biómetricos, aseveró el director del Registro Federal de Electores, René Miranda.

En entrevista sobre este nuevo episodio de intento de comercialización del padrón electoral, aseveró que en tanto que el INE es responsable del manejo de los datos personales de los ciudadanos se determinó que la información más sensible, correspondiente a los datos biométricos, se encuentre alojada en otra estructura. Destacó que el diseño para reforzar la seguridad hace muy complejo acceder a los mismos y también asociar directamente los datos biométricos con el nombre y otra información del ciudadano.

Miranda destacó que con las investigaciones realizadas se corroboró que la información difundida recientemente corresponde a 99 mil ciudadanos y únicamente a 13 de los 48 campos de los que se compone la credencial electoral, no la totalidad de la información. Por eso hablamos de un extracto del padrón electoral, no del padrón en su conjunto. Sin embargo, reconoció que en esa información hay datos como el nombre, apellidos, domicilio, colonia, sección electoral, entre otros.

En paralelo, el Instituto Nacional de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales ya entró en contacto con el INE, que le ha notificado los pormenores de este nuevo suceso. Con ello, basado en la ley en la materia se determinarán las acciones para reforzar su protección y, en su caso, deslindar responsabilidades.

El INE ya solicitó la colaboración de la policía cibernética de la Guardia Nacional, a fin de agilizar el retiro de la información del sitio donde se encuentra alojada. Miranda explicó que el caso está directamente asociado al que se detectó en marzo de 2020, porque se trata, según lo investigado, del mismo corte de información que ya en su momento se denunció ante la FEDE y que entonces se difundió en Facebook.

Admitió que hay sitios que asumen responsabilidades y colaboran en cuanto identifican que hay información ilegal, como Facebook, Amazon o Mercado Libre. En esta ocasión, por tratarse de un sitio diferente, puede ser más complejo retirarla.

–¿El INE tiene responsabilidad?

–Tenemos responsabilidad de resguardo. Hay que analizar cómo se dieron las cosas. Determinar la vulneración de datos. Es un tema más jurídico que tenemos que resolver cuando contemos con mayor información, pero dependerá de avanzar en las indagatorias.

Para tal efecto informó que ya se dio vista a la Unidad Técnica de lo Contencioso Electoral y al Órgano Interno de Control.