Emir Olivares Alonso

Los congresistas estadunidenses de origen latino dieron a conocer un informe en el que destacaron la labor de los migrantes, con o sin documentos, para la economía, la sociedad y el desarrollo de Estados Unidos.

Si bien miles de ellos son fundamentales como mano de obra en sectores de la economía considerados esenciales durante la pandemia del Covid-19, en el reporte también se enfatizó su relevancia para la innovación, el emprendimiento y la recuperación económica del país.

En el contexto de los debates por la propuesta para una reforma migratoria integral enviada por el presidente Joe Biden al Congreso, que busca la ciudadanía para 11 millones de personas en condición migratoria irregular –la mitad de ellos mexicanos–, el llamado Caucus Hispano, conformado por legisladores de origen latino, remarcó que en 2019 los migrantes pagaron al Estado 492 mil millones de dólares en impuestos locales y federales.

Su importancia es vital en Estados Unidos, subrayó esa fracción del Congreso: representan uno de cada siete ciudadanos y uno de cada seis empleados, colaboran en sectores agrícolas y de servicios que mantuvieron la economía a flote, al igual que en el área sanitaria, colocándose en la primera línea de acción contra la pandemia; además, generan 25 por ciento de los nuevos negocios y participan en tres de cada cuatro patentes solicitadas.

La crisis del Covid-19 ha revelado que los trabajadores migrantes desempeñan una función fundamental en el suministro de mano de obra esencial en los sectores agrícola y de servicios, así como en otras partes de la economía, por lo que probablemente estuvieron en mayor riesgo de contagio y muerte por la enfermedad, enfatizaron en el informe difundido hace unos días.

Hay estados que dependen de su labor: 69 por ciento de los trabajadores agrícolas de California, siete de cada 10 de los empleados para el procesamiento de productos del mar en Alaska y 66 por ciento de quienes laboran en el procesamiento de carne en Nebraska son migrantes, la mayoría en condición irregular.

No todo es mano de obra: en el ámbito sanitario son extranjeros casi cuatro de cada 10 de los asistentes de salud en el hogar, tres de cada 10 médicos y 22 por ciento de los auxiliares de enfermería.

Además, 75 por ciento de las patentes solicitadas por las 10 principales universidades estadunidenses son producidas por extranjeros.