Dora Villanueva

Las medidas de austeridad que se pusieron en marcha con el inicio de la actual administración han contenido el aumento del gasto público destinado a las prestaciones de servidores públicos, muestran datos oficiales. Los incrementos que se han dado en este rubro, respecto del último año del gobierno previo, se concentran en una tercera parte de los ramos de la administración pública federal, mientras en el resto ha disminuido.

Datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público muestran que entre el tercer trimestre de 2018 y el mismo periodo de 2021, en nueve ramos que contienen dependencias y organismos aumentó el gasto en prestaciones a funcionarios, mientras en 22 se ha recortado. Estos últimos los encabezan la Función Pública, Gobernación y la Oficina de Presidencia.

El incremento real de 2 por ciento –equivalente a 15 mil 474 millones de pesos– se acota así a una tercera parte de los ramos que están bajo la administración pública federal.

El gasto en prestaciones de servidores públicos alcanzó 110 mil 69 millones de pesos durante el tercer trimestre de 2021, mientras en el mismo periodo de 2018 sumó 94 mil 595 millones de pesos. El incremento se recarga sobre todo en Seguridad y Protección Ciudadana, ramo en el que se aloja la Guardia Nacional.

Los datos de Hacienda muestran que en Seguridad y Protección Ciudadana aumentó 2 mil 891.4 por ciento el gasto en prestaciones, en el ramo de Previsiones y Aportaciones para los Sistemas de Educación Básica, Normal, Tecnológica y de Adultos –por conducto del cual la Secretaría de Educación Pública destina recursos a la educación en la Ciudad de México y al pago de nómina magisterial en el resto de los estados– el incremento fue de 2 mil 243.9 por ciento.

También en Energía, que en general ha visto aumentar su presupuesto durante la actual administración, con el objetivo de financiar la refinería de Dos Bocas, el gasto en prestaciones de burócratas aumentó 54.2 por ciento; en Relaciones Exteriores, 43.9 por ciento; en Agricultura y Desarrollo Rural, 5.1 por ciento y en Petróleos Mexicanos, 20.4 por ciento.

Eso por mencionar los ramos donde más aumentos hubo, pero en el otro extremo se encuentran la Función Pública, donde al paso de cuatro años este gasto cayó 99.1 por ciento real; Gobernación, donde lo hizo en 94.3; Presidencia, con 93.1; Bienestar, con 88.7; la Comisión Reguladora de Energía, con 81.3; la Comisión Nacional de Hidrocarburos, con 71.3 y la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal con 62.6 por ciento, al mencionar los recortes más pronunciados.

Si bien hay una baja general en prestaciones extra, un puñado de organismos persiste en mantener seguro de gastos médicos mayores, que se reportan como recurso público y no como parte de algún fideicomiso privado de los trabajadores.

Entre estos se encuentran la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros; Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero; la Universidad Autónoma Chapingo; Liconsa; el Colegio de San Luis; el Colegio de la Frontera Norte; el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social; la UNAM y la Guardia Nacional.

En general, de pagar más de 713 millones de pesos durante el tercer trimestre de 2018, en el mismo periodo de 2021 se pagaron 308 millones por seguros de gastos médicos de burócratas. Hay una baja porque se barrió con esta prestación en la mayoría de organismos y dependencias, pero más de la mitad lo absorbe la Guardia Nacional (156 millones) y otro 38 por ciento (117 millones), la UNAM.