Braulio Carbajal

Las cifras de crecimiento trimestral en Estados Unidos fueron sorpresivas, cuando un repunte explosivo siguió a un derrumbe histórico. Imagen de un centro comercial en Boston.

El Departamento de Comercio de Estados Unidos informó que en el tercer trimestre de 2020 la economía del país creció a un nivel sin precedente, con un aumento de 7.4 por ciento, equivalente a un ritmo anualizado de 33.1 por ciento, luego de que en el segundo cayera 9 por ciento, que equivalió a un desplome anualizado de 31.4 por ciento.

El repunte, coincidieron analistas, será un importante motor para ayudar a México a salir de la recesión económica en la que se encuentra como consecuencia de la pandemia de Covid-19.

Para Alfredo Coutiño, director de análisis para América Latina de Moody’s Analytics, los datos de EU indican que México se encamina a reportar un repunte en su crecimiento del tercer trimestre, esto como consecuencia de un fuerte incremento en las exportaciones hacia el país vecino del norte.

El repunte del mercado estadunidense es el motor principal que está sacando a la economía mexicana de la recesión, dijo el especialista.

Lo anterior, enfatizó Coutiño, confirma la alta dependencia de la economía mexicana respecto a la de EU, de tal forma que cuando a la estadunidense le va bien, a la de México le va mucho mejor; sin embargo, cuando la del país vecino marcha mal, la consecuencia es que la local se hunde, como pasó en la primera mitad del año.

De acuerdo con datos oficiales, el cierre comercial provocado por la pandemia provocó que la economía de EU cayera 31.4 por ciento en el segundo trimestre del año, en tanto, el producto interno bruto de México se desplomó 18.7 por ciento en el mismo periodo.

Carmen Alcibar, analista de Grupo Bursamétrica resaltó que el crecimiento local seguirá siendo modesto mientras no se fortalezca el mercado interno, para lo cual urge que el gobierno ponga en marcha medidas de apoyo y de certidumbre al sector privado.

Que Estados Unidos se recupere son buenas noticias para nosotros por el grado de integración de las dos economías, pero en México necesitamos que las políticas públicas del gobierno le den certidumbre a la iniciativa privada, eso es un ingrediente muy importante, que si se aplica estaríamos viendo un crecimiento más firme, explicó la analista.

El mercado interno en México sigue deprimido por la crisis de la pandemia que ha dejado menores ingresos en la población, pero algo importante es que el mayor empleo en el sector de la construcción de EU se puede reflejar en mayores remesas, lo que aquí se traducirá en un mayor consumo por parte de las familias, apuntó la especialista.

Ambos especialistas advirtieron sobre los riesgos latentes en el último trimestre del año, como un segundo brote de la pandemia y la elección presidencial en EU, lo que genera incertidumbre y, por tanto, causará un menor dinamismo económico en la última parte de 2020.

La analista advirtió que de darse un bajo crecimiento económico en EU, México seguirá presentando números débiles durante el primer trimestre de 2021 y tal vez, durante toda la la primera parte del año.