Israel rodríguez

Las medidas adoptadas por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para apoyar financieramente a Petróleos Mexicanos (Pemex) no son suficientes para contrarrestar el deterioro financiero de la empresa, aseguró ayer Fitch Ratings al dar a conocer una baja en la calificación de la deuda emitida por la petrolera, tanto en moneda nacional como extranjera.

El anuncio ocurrió dos semanas después de que funcionarios de Pemex y de la Secretaría de Hacienda sostuvieron reuniones en Nueva York con bancos de inversión y tenedores de bonos de la petrolera.

El gobierno ha fallado en reconocer la viabilidad del perfil financiero de la compañía y/o la importancia estratégica que representa para el propio gobierno y el país, consideró Fitch. Una situación financiera presionada en Pemex tiene el potencial de interrumpir el suministro de combustibles líquidos en todo el país, lo cual podría tener consecuencias sociales y económicas significativas para México, aseguró.

La firma financiera redujo la calificación de la deuda de Pemex –que suma 106 mil millones de dólares, de los cuales 9 mil 500 millones tienen vencimiento de corto plazo– de AAA a AA para las emisiones en moneda nacional, y de BBB+ a BBB en extranjera. En ambos casos conserva el llamado grado de inversión. Una menor calificación eleva el costo de financiamiento para la empresa.

Fitch argumentó un deterioro en los flujos de efectivo y los importantes montos de vencimientos de deuda de Pemex para fundamentar la baja en la calificación.

La reducción de la calificación no nos sorprende, pero sí preocupa, expresó el subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera Gutiérrez. Agregó que la decisión refleja las condiciones en que se encuentra la empresa productiva del Estado.

Herrera Gutiérrez afirmó: Para nadie era sorpresivo, y lo que se podía ver era cómo estaban operando los bonos de Pemex y los del soberano, y de alguna forma el mercado ya estaba descontando y esperando esto. Descartó que la baja en el perfil crediticio pueda contagiar la calificación soberana de México.