Los precios del petróleo subieron el jueves cerca de 3 por ciento y los de la gasolina se dispararon más de 13 por ciento, ya que casi un cuarto de la capacidad de refinación de Estados Unidos permaneció cerrada y los operadores se apuraban en reorientar millones de barriles de combustible. El referencial estadunidense West Texas Intermediate (WTI) se elevó 1.27 dólares (2.76 por ciento) a 47.23 dólares por barril. El contrato cerró agosto con una caída de casi 6 por ciento, la baja mensual más profunda desde marzo. En Londres el referente global Brent avanzó 1.52 dólares (2.99 por ciento) a 52.38 dólares el barril. La mezcla mexicana de exportación subió 46 centavos (1.69 por ciento) a 45.62 dólares por barril. El galón de gasolina (3.8 litros) negociado en Nueva York subió 13.5 por ciento a 2.1399 dólares. Los precios estuvieron apoyados por la utilización de las reservas estratégicas de Estados Unidos, indicó Matt Smith, de ClipperData.

 

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